En el Ajedrez existen cinco situaciones reglamentarias de empate, comúnmente llamadas "Tablas", definidas por las Leyes del Ajedrez de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE), las cuales explicaremos a continuación:
En ajedrez, el ahogado (Stalemate en inglés) es una situación que se produce cuando el jugador de quien es el turno no tiene jugadas legales para realizar y el rey no se encuentra en estado de jaque, es decir, el rey no puede moverse a otras casillas porque quedaría en posición de jaque o porque están ocupadas por piezas propias o piezas ajenas que están defendidas, y además el jugador no tiene otras piezas que puedan moverse o capturar a piezas adversarias.
Se llega a esta situación cuando ninguno de los jugadores tiene material suficiente para dar mate al rey contrario. Se dice que la partida termina en una "posición muerta". Esto ocurre cuando en el tablero solo quedan: Rey contra rey. Rey y caballo contra rey.
La regla de los cincuenta movimientos es una regla recogida en las Leyes del ajedrez de la Federación Internacional de Ajedrez, que establece que una partida puede ser tablas si cada jugador ha hecho los últimos 50 movimientos consecutivos sin que haya habido ningún movimiento de peón ni captura de pieza.
Las situaciones 2 y 3 son bastante parecidas como podemos observar.
Tenemos la regla de las tres posiciones idénticas en el artículo 9.2.1 “La partida es tablas, bajo un reclamo correcto de un jugador que está en juego, cuando la misma posición (no necesariamente por repetición de movimientos), al menos por tercera vez va a producirse.
Esto que significa: Si se repite una posición ( no tiene que ser de manera consecutiva) tres veces. Para que se considere la misma posición debe cumplirse estos 3 requisitos:
-Le toca jugar al mismo jugador
-Las piezas del mismo tipo y color ocupan las mismas casillas
-Los movimientos posibles de todas las piezas de ambos jugadores son los mismos.
EJEMPLO: El conocido "Jaque continuo" o "Jaque Perpetuo".
En el ajedrez es legal acabar en tablas si los dos rivales llegan a un acuerdo para dar por finalizada la partida y como mínimo han realizado un movimiento cada uno.
En determinados torneos, el propio la propia competición pone reglas específicas en relación a partir de que movimiento los jugadores pueden ofrecer y acordar tablas.
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